DIRECCIONES
Para las tortas:
Precalienta el horno a 350°F. Engrase ligeramente el fondo de una bandeja para hornear de 15x10x1 pulgadas con mantequilla y cubra con papel pergamino.
En un tazón pequeño, mezcle la harina, el polvo para hornear y la sal; dejar de lado.
En un tazón grande, mezcle la mantequilla derretida y el azúcar hasta que estén bien combinados y esponjosos. Agrega los huevos y la vainilla y bate hasta que quede suave. Agrega la mitad de la mezcla de harina, luego la leche y finalmente la harina restante, batiendo entre cada adición hasta que quede suave. Vierta la masa de manera uniforme en la bandeja para hornear preparada y luego golpee la bandeja contra la encimera varias veces para eliminar las burbujas de aire. Hornee de 20 a 30 minutos o hasta que al insertar un palillo en el centro, éste salga limpio. Deje enfriar completamente antes de estampar los corazones con un cortador de galletas.
Una vez que el pastel se haya enfriado, elimine los pasteles de corazón con un cortador de galletas de corazón. Deberías poder obtener 12 pasteles de corazón (3 filas de 4). Retire el borde del pastel y resérvelo para otro uso… o tómelo como refrigerio mientras lo hornea.
Para el glaseado:
Este glaseado se endurece ligeramente (para crear un delicioso glaseado crujiente y crujiente) a medida que alcanza la temperatura ambiente, por lo que tendrás que trabajar con bastante rapidez.
En una cacerola mediana, hierva a fuego lento la mantequilla y la leche y bata para combinar. Apague el fuego y agregue el extracto de vainilla, la sal marina, el colorante rosado y el azúcar en polvo (1 taza a la vez) hasta que quede suave. Con un cucharón pequeño o 1/4 de taza medidora, vierta el glaseado sobre un pastel de corazón y extiéndalo con una espátula acodada. Está bien si los lados de los pasteles no están completamente cubiertos.
Decorar con chispitas. Repita con los pasteles de corazón restantes. Dejar que se enfríe antes de servir.